PRACTICA ·# 7
TRABAJAR EN ESO Y CELEBRAR SUS VICTORIAS.
Para mantener su importancia, su sanidad y su efectividad, debemos de tomar un tiempo para retroceder y evaluar ¿Qué se esta haciendo? ¿Y como lo estamos haciendo?
El dedicar un tiempo para evaluar nos permite ver la efectividad de lo que se ha trabajado, y podemos medir los logros alcanzados, así como también detectar algo que este funcionando mal y poder corregir a tiempo.
Autoevaluar y ser auto crítico de lo que se ha hecho, veremos con claridad lo que en realidad esta correcto o incorrecto, resultados a medias, incompletos, afectarán el proyecto y esto lo hará enfermar perdiendo así su sanidad.
La mayoría de los líderes en la iglesia, trabajamos y damos lo mejor en el ministerio que Dios nos encomendó, pero no podremos saber si esta funcionando bien, si nó estamos trabajando paso a paso, y para esto necesitamos tener un tiempo para evaluar la efectividad del ministerio. No podemos manejar lo que no podemos medir.
Medir es el trabajo desarrollado.
HACER ESPACIO EN SU CALENDARIO.
El tener un margen creador correcto y efectivo debemos programar tiempos consistentes para retirarnos. Ser una parte integral del plan completo.
El margen no sucede accidentalmente, ni tampoco automáticamente, debe ser practicado.
Reunidos, tomamos acuerdos, se puede encontrar la sabiduría.
Cuando no hay historias positivas, nuestra misión significa que no fuimos efectivos.
Reunir al equipo cada semana para hablar del éxito y de las fallas que haya en cada área, hacer cambios, ver que fue lo que funcionó mejor, y evitar repetir lo que no funcionó.
CONFRONTAR LOS HECHOS
Es increíble como una evaluación honesta puede conducir a observaciones bastante desagradables.
El hecho de que cuando las personas están involucradas, hay siempre áreas que necesitan mejorar. Las actuaciones son más fáciles de mejorar que los sistemas..
En estos espacios todos pueden sugerir y tomar sugerencias.
Son momentos de diálogo intenso y debate, y a veces hay lágrimas.
No hay vacas o programas sagrados.
Todo está en debate y debe ser defendido por nuestras misiones y valores.
Cuando eres líder tienes más responsabilidades.
Cuando tienes un ministerio exitoso, más responsabilidades tienes porque cuando algo anda mal o sale mal, siempre buscamos a quién echarle la culpa cuando en realidad es un problema de sistema. Con esto podemos perder gente buena, la confianza del equipo.
Debemos buscar un tiempo para evaluar, así como tenemos tiempo para comer, dormir, así debemos de ver que tenemos que trabajar para que sobreviva su iglesia.
CELEBREMOS LAS HISTORIAS
Si quiere que una conducta se repita, entonces necesita recompensarla. Pocas cosas tienen mas recompensa que escuchar su nombre como parte de la historia de una vida cambiada.
Celebrar una victoria, es reconocer con alegría todas las horas de sacrificio, práctica y esfuerzo.
CELEBRAR LAS VICTORIAS.
Cuando los objetivos son alcanzados o grandes planes son realizados exitosamente, hay que festejar y después ir por el próximo objetivo.
“Estas prácticas no funcionarán si no tenemos valores claros o donde no se haya trabajado duro”
ESTABLECER CIERTAS PRACTICAS AUMENTARÁ
9 comentarios:
SEMINARIO TEOLÓGICO CAMPUS HOREB
PROFESOR: Rafael Pola Baca
Alumno Carlos Monjaras Mirón
PRÁCTICAS, NO PROGRAMAS
Las siete prácticas son solamente eso: prácticas. No son nuevas ideas de programas. No es necesario trabajar mucho en la iglesia para descubrir que no hay programas hechos que se ajusten para todo. El ministerio es más arte que ciencia, y nuestra cultura siempre cambiante hace necesario evaluar constantemente, lanzar, y ocasionalmente hasta destruir programas.
¿Así que cuáles son estas siete prácticas?
1.- Clarificar el objetivo
2.- Pensar en pasos, no en programas
3.- Reducir el enfoque
4.- Enseñar menos por más
5.- Escuchar a los de afuera
6.- Reemplazarse a uno mismo
7.- Trabajar en eso.
De hecho las siete prácticas demostraron respuesta a nuestros intercesores fervientes, ya que buscamos crear una iglesia que refleje la misión de nuestro Salvador. Estamos convencidos de que estas prácticas son expresiones de cómo el Espíritu Santo ha elegido trabajar a través de la iglesia local. Y hemos venido a depender más de Dios y menos de nosotros mismos, ya que estás prácticas nos han forzado a abandonar algunos acercamientos cómodos, aunque inefectivos del Ministerio.
LOS PLANES MEJOR DISEÑADOS
Ray había planeado el día perfecto: iglesia en la mañana. La primera lanzada a las 13:00, y de regreso a la iglesia para una reunión de grupo esa noche. Eso fue antes de que un juego de nueve golpes pusiera a su equipo en el primer lugar, y la ESPN lo eligiera para el juego de la noche del sábado de esa semana. Como resultado, el horario de juego había sido cambiado a las 20:00. Así que ahora, en lugar de una tarde de béisbol, estaba enfilándose para una tarde de bullicio en una reunión de la iglesia Comunitaria de Meadowland. La visión de Ray se delimitó y su frente se arrugo al mirar a los carriles de tránsito del norte que se dirigían hacia su juego.
Ray y su esposa Rally, junto con otras doce personas, habían comenzado la iglesia en una casa cercana. Su visión era pura y simple: presentarle a las personas a Jesucristo. Más que una visión, era una pasión.
El autor nos muestra la historia del pastor Ray Martín, de la iglesia comunitaria de Meadowland, nos muestra la disyuntiva que tiene al no saber o estar seguro que decisión tomar, la de asistir a una reunión de su iglesia o aun gran juego de béisbol el cual le apasionaba.
En diez años de crecimiento de la iglesia se había convertido en pastor financista y director de recreación y podría ser el principal de un colegio, él sentía que la iglesia lo manejaba a él en vez de él a la iglesia, al asistir al juego se encuentra con el dueño del equipo quien le cambia su perspectiva o su forma de ver las cosas.
Le muestra siete prácticas de liderazgo
Práctica 1 CLARIFICAR EL OBJETIVO
-Pregúntese a usted mismo… ¿Cuál es la cosa más importante? Y comenzará a estar claro. Para nuestro equipo, es ganar partidos. Seguro, estoy aquí para ganar dinero, pero la manera más fácil para obtenerlo en el béisbol es ganando. Así ¿Cuál es para usted, Ray? ¿Qué es lo más importante? –Vidas cambiadas, dijo Ray finalmente. ¿Qué, Ray? –Me preguntó cuál era nuestro objetivo. Es una vida que ha sido cambiada… ese es un objetivo.
Hay que definir lo más importante en cada nivel de la organización.
La iglesia debería ser más categórica que cualquier otra clase de organización para “clarificar la victoria”, simplemente porque lo que está en juego es mucho más: la eternidad depende del balance.
¿Cómo SE MIDE EL ÉXITO?
En una conferencia reciente yo estaba en un ascensor y oí a un pastor joven preguntarle a otro:
-¿Cuánta gente promedio en asistencia el domingo? y ¿Cuál es su presupuesto mensual?
Básicamente, el joven pastor le estaba preguntando a su amigo “¿Cuál es el resultado?” Correcto o no, tenía una idea predeterminada acerca de cómo medir el éxito en su ministerio.
Demasiados líderes de iglesias han caído en el mito que para clarificar la victoria hay que establecer logros de asistencia y obtener un montón de dinero. Estos pueden ser indicadores ciertos de la salud de su organización, pero no necesariamente los números fuertes significan que usted está ganando.
Clarificar la victoria simplemente significa comunicar a su equipo qué es realmente importante y qué es lo que realmente importa. Formulando ciertos interrogantes, recompensando la actuación de alguien, celebrando resultados significantes, esto es todo parte de clarificar la victoria. Practicar este principio significa que usted está decidido a definir un objetivo, de manera que no comunica accidentalmente el objetivo equivocado o mantiene a su equipo adivinando qué es lo realmente importante.
La mejor manera de elevar el poder colectivo de su equipo, es asegurarse que todos sepan qué significa “ganar”
CUANDO NO SE CLARIFICA EL OBJETIVO
Nada frustra más la moral que cuando los miembros de un equipo co agendas separadas se disputan entre sí. Cuando esto pasa, es usualmente porque aquellos a cargo no han dispuesto el tiempo necesario para clarificar la victoria para su equipo.
LA VENTAJA DE CLARIFICAR LA VICTORIA
Cuando usted clarifica el objetivo, ayuda a su equipo a estar en la misma página y puede administrar sus recursos más eficientemente.
CUATRO PASOS PARA CLARIFICAR LA VICTORIA
Si desea clarificar la victoria para su equipo, tiene que tomarse el tiempo para definir qué es importante en cada nivel de la organización. Aquí están los cuatro pasos para ayudarle a clarificar la victoria y establecer la victoria, como un hábito en su organización.
1. Resumir el objetivo en una frase simple
2. Mantener el éxito tan específico como sea posible
3. Reestablecer el objetivo frecuente y creativamente
4. Reunirse para clarificar la victoria en cada nivel.
Práctica 2 PENSAR EN PASOS NO EN PROGRAMAS “Antes de comenzar algo, asegurese que lo lleva a donde lo necesita”.
PLANIFICAR PASOS VERSUS, PLANIFICAR PROGRAMAS
Adoptamos la frase “Pensar en pasos, no en programas”, porque muchos de nosotros estábamos conscientes de la complejidad que puede darse durante los años en que se agregan nuevos programas a la iglesia. Todos hemos visto cómo los programas competitivos pueden lidiar con los presupuestos, calendarios y voluntarios. Hemos aprendido que cuando la iglesia se mueve por inercia, es cuando se programa por demás.
Primero determine dónde quiere que la gente esté. Luego descubra cómo va a llevarlos allí. Eso es hacer ministerio con un fin en la mente.
PENSAR EN PASOS PARA EL CRECIMIENTO ESPIRITUAL
Cuando comience a pensar en pasos, comience a pensar específicamente acerca de cómo llevar a la gente al paso siguiente en su crecimiento espiritual.
PENSAR EN PASOS PARA UN CRECIMIENTO EN LAS RELACIONES
Por otro lado, cuando piense en pasos y no en programas, usted también descubrirá maneras de ayudar a la gente a crecer en sus relaciones.
COMO CREAR UN PASO EFECTIVO
1.- Cada paso debe ser fácil. Para que alguien pueda dar el próximo paso, no tiene que ser demasiado grande para darlo.
2.- Cada paso tiene que ser obvio. Solamente porque usted haya creado todos los pasos posibles, no significa que la gente los tome inmediatamente.
3.- Cada paso debe ser estratégico. Si un paso no es estratégico, entonces no es un paso hacia algún lugar.
Práctica 3 REDUCIR EL ENFOQUE “Hacer menos cosas para causar un impacto mayor”.
Tu potencial de lograr un resultado con tu vida está directamente relacionado con la predisposición a reducir el enfoque
LAS IGLESIAS CON DESORDEN DE DÉFICIT DE ATENCIÓN
Lo que es verdad para las personas también lo es para las organizaciones: hay una tendencia natural de derivarse hacia la complejidad.
Las iglesias sienten una constante presión en cuanto a proveer programas sobre la base de las necesidades. Si usted esta en el ministerio, naturalmente asume que es su trabajo cubrir las necesidades de otros. Pero no sucede simplemente porque existen. Y quizás ya no ejerce un método selectivo de cumplir con esas necesidades.
Los líderes de iglesias le temen a las consecuencias de eliminar ciertos programas. Cada líder sabe que hay un grado de riesgo al eliminar cualquier programa. Alguien se enojará inevitablemente. Han sido despedidos pastores y se han separado iglesias por motivos menores. Así que… ¿quién puede culpar a un líder por considerar cuidadosamente quién y cuánta gente va a reaccionar antes de desconectar el programa? Pero cuando un líder le teme a las consecuencias de eliminar un programa más que los efectos a largo plazo de mantenerlo, el resultado puede ser costoso.
SIMPLIFICAR, SIMPLIFICAR
En su libro Focus (focos), Al Riese hace algunas observaciones interesantes acerca de la inclinación hacia la complejidad que existe dentro de cada organización. Reducir el enfoque significa resistir a la complejidad, y ejercer la simplicidad.
MATAR LO QUE FUNCIONA
Quizás tenga que eliminar lo que funciona para reemplazarlo por algo que funciona mejor. Reducir el enfoque significa elegir lo que potencialmente funciona mejor, en lugar de lo que esta funcionando. Puede ser que suene raro, pero la mejor manera para que un programa funcione es matar al programa que esta funcionando. Jesús destaca este principio en Juan 15. Aunque no se refiere específicamente a una organización, el principio es el mismo. Dice: “Mi padre es el labrador. Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará” (vv. 1-2). Todos entienden este concepto. Si algo no funciona, descártelo.
Lo que puede hacer, sin embargo, es cambiar la imagen de la iglesia creando entornos atractivos y de ayuda para las distintas etapas de la vida de todos.
Pero si piensa comenzar a hacer del entorno una marca diferente, debe hacer dos cosas:
1.- Identificar al grupo a que apunta
2.- Diseñar cada entorno para hacer una cosa.
Usted necesita descubrir a quién puede alcanzar, e ir por ello
REDUCIR ES EL CAMINO
Cuando usted aplica el principio “reducir el enfoque” a su entorno, descubrirá un número de ventajas casi inmediatas. Cuanto más delimita cada entorno, mayor importancia adquiere.
¿DEMASIADO PESADAS PARA HACER UN GIRO?
Es importante cómo “reducir el enfoque” es diferente a otras prácticas que hemos considerado hasta ahora. Clarificar la victoria significa evaluar y definir lo que realmente funciona. Es una práctica importante para familiarizar a todos de cómo luce y se siente el éxito. Pensar en pasos y no en programas, es identificar e implementar programas que funcionen como pasos que lleven a la gente a una dirección estratégico.
REENFOQUE SU MISIÓN
Donde sea que una iglesia decide reducir el enfoque, debería ser en el contexto de nuestro llamado a conducir a las personas a seguir a Cristo. Por eso es que la iglesia es básicamente diferente de cualquier otra organización. No estamos en asuntos de educación. reforma social o revolución política. Cualquiera de estos temas puede potencialmente diluir la efectividad de la iglesia.
Práctica 4 ENSEÑAR MENOS POR MÁS “Diga solamente lo que necesita decir a las personas que necesitan oírlo”.
MENOS ES MAS
Cuando decimos “enseñar menos por más”, decimos que deberíamos repensar qué y cómo comunicarlo a su equipo. Si “reducir el enfoque” sugiere hacer un impacto mayor cuando haga menos., “enseñar menos por más” implica que puede mejorar drásticamente cuánta gente aprende si es que usted enseña menos. Eso no necesariamente significa que diga menos palabras. Sino que reduce el espectro de lo que enseña para cubrir menos información.
Los buenos maestros comienzan por identificar qué es más importante saber para sus alumnos.
CUATRO PASOS PARA ENSEÑAR MENOS POR MÁS
Hay un proceso de cuatro pasos para enseñar menos por más.
1.- Decidir qué va a decir
2.- Decidir decir una cosa por vez
3.- Decidir cómo va a decirlo
4.- Dígalo una y otra vez
POR QUÉ LAS IGLESIAS ENSEÑAN MÁS POR MENOS
Hay un número de razones por las cuales las iglesias encuentra difícil establecer “enseñar menos por más” como práctica en su organización. Es más fácil enseñar más por menos que menos por más. Los métodos convencionales son más fáciles. Cuando se enseñan una lista de varios puntos, pueden pasarse unos pocos minutos desarrollando cada idea. Pero si usted enseña un principio, tiene que extenderlo y explicarlo creativamente, hasta que esté entendido por completo.
El contexto del ministerio tiende a ser más demandante que el contenido.
Han caído en el mito de “profundizar”
Se preocupan lo suficiente para decir
Temen dejar algo afuera
Lo que enseñan esta predeterminado por entidades de afuera del ministerio.
Confunden la diferencia entre información y aplicación.
Práctica 5 ESCUCHE A LOS DE AFUERA Enfóquese en quien trata de alcanzar y no a quien quiere conservar.
PENSAMIENTO DE LOS QUE ESTÁN ADENTRO
Es fácil para las necesidades o intereses de los de adentro manejar las prioridades de cualquier organización. Es sólo la tendencia natural de cualquier grupo a convertirse en uno de adentro, Si usted está lo suficiente rodeado por gente que piensan como usted piensa, creerá más y más que es la mejor manera de pensar. Con el tiempo s encontrará con que las voces externas no son compatibles con su opinión que vienen desde el exterior.
PENSAR DESDE AFUERA
Alguno de nosotros ha estado en la iglesia por tanto tiempo, que hemos olvidado cómo es nunca asistir. Hemos creído por tanto tiempo lo que creemos, que no sabemos cómo piensa un no creyente. Y cuando la persona promedio a menudo él o ella se siente como el cliente que entra en una concesionaria. En muchos casos la persona sospecha, se siente presionada y hasta manipulada.
La Iglesia de la Comunidad de North Point fue establecida en parte para ser una alternativa a lo que la gente experimenta en otras iglesias. Creamos una iglesia con los de afuera en mente.
Considere estas estadísticas. De acuerdo con Barna Research, alrededor de cien millones de estadounidenses de todas las edades no van a la iglesia. “Si todos los que no van a la iglesia en Estados Unidos fuesen una nación por sí mismos, sería el país número once más poblado de la Tierra.” Esos sí son un montón.
Nuestro punto es que las iglesias por todo el país luchan para reflejar sus intereses, valores y necesidades de la gente que ya asiste a la iglesia. Esta última está principalmente caracterizado por los de adentro que tratan de alcanzar a los de adentro.
CUANDO IGNORAR A LOS DE ADENTRO
¿Qué piensa que diría Jesús de abandonar a caso el sesenta por ciento de quienes asisten a la iglesia en los Estados Unidos, para alcanzar al cuarenta por ciento que no va? Hay una audiencia masiva potencial que es sacrificada porque muchas iglesias tratan de conservar un puñado de clientes tradicionales satisfechos.
ESCUCHEN A LOS DE ADENTRO QUE OYEN A LOS DE AFUERA
Cuando alguien de adentro invierte en alguien de afuera de la iglesia, algo cambia. El corazón sigue la inversión, y el resultado es una auténtica relación entre alguien de adentro y alguien de afuera. Es por eso que Jesús dijo: “Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón” (Mateo 6:21). Lo que hemos visto suceder en los corazones de los de adentro, ha sido tan significante como lo que hemos testimoniado en los corazones de los de afuera.
OIR A ORGANIZACIONES QUE ALCANCEN A LOS DE AFUERA
La razón por la cual un montón de iglesias no se conectan con los de afuera, es porque no han pasado el tiempo suficiente aprendiendo el lenguaje correcto.
Para oír efectivamente a los de afuera, debe aprender su lenguaje
PRACTICA 6
REEMPLAZARSE A UNO MISMO
Aprenda a delegar lo que usted hace.
Es soberbio pero inevitable: un día se acabará. Un día alguien más estará haciendo lo que usted hace ahora. Un día será reemplazado. Tenga o no estrategia, finalmente usted saldrá. Y ese día, todo lo que hizo, todo lo que soñó y todo lo que construyó será puesto en las manos de alguien más. Como todos los demás, usted probablemente está planeando en dejar marca y dejar un legado. Pero si es un poco como yo, tiende a hacer planes con el mañana en mente, no la próxima década. Y aunque en lo profundo sepa que no va a estar en la foto, nada en la manera en que trabaje o viva testifica que ha logrado la idea. El hecho es, tiene solamente dos elecciones:
1.- Puede aferrarse desesperadamente a su trabajo hasta que alguien inevitablemente lo reemplace.
2.- Puede preparar a alguien que haga lo que usted hace, y reemplazarse a usted mismo estratégicamente..
La primera opción le da un panorama limitado de que sucede en el futuro de su organización; la segunda le permite elevar su influencia con la próxima generación, quienes un día liderarán su organización.
APLAUDIR A AQUELLOS QUE APLAUDEN A OTROS
Reemplazarse a usted mismo significa que está dispuesto a alcanzarle a alguien una parte significante de lo que usted hace. Luego es usted responsable de ayudar a esta persona para que tenga éxito.
POSICIONAR A SUS VOLUNTARIOS PARA RECLUTAR
Hemos explicado por qué reemplazarse es importante en el contexto de los líderes que un día se irán de su organización. Es también esencial ver cómo este principio se aplica para expandir la base de voluntarios. Consideramos a los voluntarios nuestro recurso de base. Ellos tienen la clave para completar nuestra visión de liderar a las personas en una relación de crecimiento con Cristo.
ENSEÑE LO QUE SABE
La forma más efectiva de entrenar personas, es modelar que necesita ser hecho siendo discípulo, pero esta puede ser una idea aterrorizante para el líder promedio. Existen ciertos mitos que opacan lo que realmente significa ser discípulo. Por ejemplo, una noción es que usted debe estar más entrenado que la persona a la que entrena. Sin embargo, usted no es responsable de saber todo lo que hay que saber sobre ministerios. Pero es responsable de delegar lo que sabe.
TRES PASOS PARA DELEGAR
1.- Romperlo
Enseñarle a alguien para reemplazarlo comienza por tener un claro entendimiento de lo que está tratando de pasar.
2.- Delegar.
Cuando se reemplaza a usted mismo, está pasando algo que le ha pertenecido. Está equipando a alguien con algo que usted ha hecho, llevándolo a un papel que usted ha hecho.
3.- Dejar ir.
Esto puede ser duro, pero es necesario. Tarde o temprano, habrá que irse. Así que practiquemos ahora. Dios nos da varias oportunidades a través de la vida para aprender esta lección.
PRACTICA 7
TRABAJAR EN ESO
Aquellos que trabajan en el ministerio no son diferentes, no importa cuánto hayamos servido, no interesa cuántos sermones hayamos dado o cuantos ministerios exitosos promovido, si no somos consistentes evaluando tanto nuestra actuación y nuestra estratégicas; en algún punto comenzaremos a vacilar y a perder.
El punto es, no importa cuán bueno es el sistema, un tiempo consistente de evaluación puede producir beneficios muy buenos.
HACER ESPACIO EN SU CALENDARIO
El espacio de calendario va más allá de estructurar un tiempo específico de evaluación. Puede también incluir detener un programa o actividad por un período de tiempo.
CELEBREMOS LAS HISTORIAS
Una cosa clave a recordar acerca de crear un margen en su organización, es que no es suficiente para evaluar. También tiene que celebrar. Porque en ese momento de alegría están puestas miles de horas de sacrificio.
Práctica 7
TRABAJAR EN ESO
IDEA PRINCIPAL:
Tómese tiempo para evaluar su trabajo, y celebrar sus victorias.
Para la mayoría de nosotros, nuestro margen es lo que queda después de que terminamos todo lo que tenemos que hacer.
IDEAS CREATIVAS:
Desde el comienzo se tienen que programar tiempos consistentes para alejarse de la batalla y evaluar supla, como así también su actuación. Si se ha de hacer una iglesia con un gran impacto, tenemos que empezar a actuar como una, aunque no lo seamos. La evaluación debe ser una parte de nuestra rutina. Podemos evaluar nuestro trabajo escuchando el testimonio de los demás de lo que ha vivido dentro de la iglesia, cualquiera que llegue hacer nos daremos cuenta que tan efectivos somos. Es increíble como una evaluación honesta puede conducir a observaciones bastantes desagradables. El hecho es que cuando las personas están involucradas, hay áreas que se necesitan mejorar. Algunas veces es tan simple como mejorar el rendimiento.
Una cosa clave a recordar acerca de crear un margen en la organización, es que no es suficiente para evaluar, también se tiene que celebrar. Si se quiere que una conducta se repita, entonces se necesita recompensarla. Pocas cosas tienen más recompensa que escuchar nuestro nombre como parte de la historia de una vida cambiada.
Una pregunta crítica que dentro del ministerio debemos hacernos es ¿Estoy realmente encontrando el tiempo para trabajar en el ministerio? Es lo importante de la evaluación personal porque entonces sabremos qué cosas corregir de nosotros para mejorar nuestro tiempo y modo de estrategia. Así se llegará a impactar más a los que estamos sirviendo y por los que hemos de traer a la presencia de Cristo. Dando a notar que todo tiene una organización por lo cual vale la pena vivir.
RELACIÓN IGLESIA MINISTERIO:
No importa cuánto hayamos servido, ni cuántos sermones hayamos dado o cuántos ministerios exitosos hayamos promovido, sino somos consistentes en la evaluación de nuestra actuación como de nuestras estrategias porque en algún punto empezaremos a vacilar y a perder. Al celebrar cada buen resultado en toda evaluación es la forma en motivar al equipo a seguir continuando con esa preparación.
RESUMEN DEL LIBRO: 7 PRÁCTICAS EFECTIVAS DEL LIDERASGO.
MATERIA: IGLECRECIMIENTO INTEGRAL.
PROFESOR: PASTOR RAFAEL POLA BACA
ALUMNO: ELEAZAR GONZALEZ GARCIA
PRÁCTICA 1
CLARIFICAR EL OBJETIVO
A todos nos gusta ser parte de un equipo ganador, nadie quiere pertenecer a un grupo de perdedores, la única forma de ver las trinas llenas de un estadio es cuando el equipo esta ganando, un aficionado trae a otro y así pronto todos están contagiados.
Pero si un equipo es perdedor las gradas están “llenas” pero de polvo porque nadie las ocupa.
¿Cómo saber que una iglesia esta ganado? por la asistencia de gente redimida. Ganar es fundamental, para poderlo hacer es necesario trabajar en equipo, que el líder los sepa ganar para que todos trabajen para el mismo propósito, si no todos trabajan por un firme objetivo, entonces no esta claro el objetivo.
Nada frustra más la moral de los miembros de un equipo que cuando cada quien trabaja como quiere cuando no esta claro a donde se quiere llegar.
Mientras el objetivo no este claro se esta obligando al equipo a imaginarse como es la meta.
La gran diferencia que existe entre cualquier empresa o equipo, es que los que laboran en estos lugares perciben un sueldo, algunos ni siquiera están allí a gusto, pero lo hacen por necesidad, no hay un compromiso absoluto. Mientras que en las iglesias lo que abunda son voluntarios dispuestos a trabajar con todas sus fuerzas, ganas, deseos, etc. para lograr el objetivo, pero cuando no se les sabe guiar a la meta, no hay triunfos y terminan abandonando decepcionados. A nadie le gusta perder.
LA VENTAJA DE CLARIFICAR LA VICTORIA
Cuando se clarifica el objetivo se ayuda al equipo a estar en la misma sintonía.
Al estar alineados y sintonizados ocasionan triunfos, el no hacerlo puede causar el fin de una organización.
El no alineamiento ocasiona que las personas que lleguen de otras iglesias quieran imponer la forma de trabajar de su antigua iglesia
Cuando se clarifica el objetivo se puede administrar más eficientemente
Cada iglesia debe enfrentar este desafío. En los primeros días de una iglesia, significa que el liderazgo debe decidir qué programas comenzar primero. Mientras la iglesia crece y la organización se pone más compleja, significa que tienen que decidir cómo dividir sus recursos entre los múltiples ministerios.
Cuando se clarifica el objetivo, se crea el potencial para un impulso. Cuando ha establecido una cultura donde el triunfo está claro. Cuando le gente aprende cómo se siente, se convierte en más fácil. A eso le llamamos impulso. Es una serie de éxitos; cuando alguien dice: “Tenemos que mantener el impulso”, en realidad está diciendo: “Necesitamos seguir ganando”.
Ganar motiva a un equipo. Mientras ganan, la gente les dará su tiempo, su dinero y sus corazones. Y cuando es consistente, el personal y voluntarios en su organización tenderán a…
. Trabajar más duro
. Ser menos negativos
. Creer en el liderazgo
. Permanecer involucrado.
1.- Resumir el objetivo en una frase simple
Cuando establece el objetivo formalmente y se lo propone al equipo entero, se convierte en una lente a través del cual puede visualizarse todo lo que se hace.
Cuando todos en el equipo entienden claramente el objetivo, cambia cómo hacen lo que hacen.
El líder de adoración debería lograr crear un ambiente que prepare a los estudiantes para oír el mensaje, de manera que la adoración sucede cuando los estudiantes participan y sus corazones se abren a la verdad.
El orador está posicionando el mensaje para establecer el tiempo del grupo pequeño, de manera que el éxito del orador se determina por cuan bien los estudiantes consideran la enseñanza durante su tiempo de grupo.
2.- Mantener el éxito tan específico como sea posible
Cuando se clarifica el objetivo, es como pensar en un destino en el mapa… es fácil saber cuándo gana porque se llega al destino deseado.
Un montón de iglesias dicen llegar a más gente cada año, pero de acuerdo a las estadísticas nacionales, la iglesia está declinando en asistencia y perdiendo su influencia en nuestra nación. EL hecho es que muchas iglesias no son claras en el lugar hacia dónde apuntan, así que es fácil convencerlas a ellas mismas y a todos, que están logrando algo.
No cometas el error de clarificar un objetivo en términos que son muy generales. Cuando se hace, se está engañando a todos en su organización y se falla al establecer una medida efectiva de medir el éxito.
3.- Reestablecer el objetivo frecuente y creativamente
Una vez que se ha definido un objetivo para un departamento o programa, necesita pasar más tiempo al frente de su equipo.
La próxima vez que esté en un partido de pelota, escuche a los entrenadores. Están constantemente alentando a los jugadores. Y alientan a los jugadores a comunicarse unos con otros. es por eso que la comunicación es la llave para ganar.
Hay un número de maneras en las que una iglesia puede continuamente reestablecer el objetivo para su staff y voluntarios.
.Anunciarlo en carteles indicadores creativos y en habitaciones de planeamiento, como un recordatorio constante de lo que tratan de lograr.
. Establecer preguntas estratégicas que se cuestionan en cada reunión, para ayudar a los líderes a seguir pensando en el objetivo.
. Usar videos creativos para documentar un objetivo específico, e ilustrar con comentarios de aquellos que asistieron al programa.
. Escribirlo en sus anuncios y promociones de manera que todos lo oigan.
. Promocionarlo en un ambiente creando eslóganes que lo refuercen.
Esfuércese para decir la misma cosa una y otra vez de maneras diferentes.
4.- Reunirse para clarificar la victoria en cada nivel
La mayoría de las organizaciones han escrito citas de misiones inteligentes, y han moldeado sus valores cuidadosamente.
Pocas organizaciones han resumido en una fase simple cómo luce una victoria en cada nivel de la organización. No puede parar en la cima de la organización. El principio solo lo ayudará a transformarse en más efectivo, si la práctica es llevada por los niveles donde sucede un ministerio práctico.
Cuando las personas saben que hacer, es mucho más probable que tenga éxito. Y cuando comienzan a ganar, hay más chances de que seguirán ganando. Porque a los líderes les gusta ganar, y atraerán a otros que quieran unirse al equipo ganador.
PRACTICA 2
PENSAR EN PASOS, NO EN PROGRAMAS
Un bateador puede golpear la pelota hacia el cerco, pero si es atrapada en el aire, él está afuera. Y si está afuera, el juego se cuenta como negativo en su promedio de bateo.
Así que la estrategia para cada bateador es bien clara: tiene que golpear la pelota estratégicamente en algún lugar, de manera que tenga tiempo para llegar a la primera base o, en algunos casos, lograr mover algún corredor a la próxima base.
Algunas organizaciones son como bateadores de la Pequeña Liga. Solo si golpean la pelota en cualquier lugar se ponen contentos y se sienten bien con lo que han hecho. Realmente no importa si llegan a la base o si lo que hacen los lleva a donde realmente quieren ir. Solamente tratan de golpear la pelota en algún lugar.
Desdichadamente, las iglesias tienen una reputación de llevar adelante el ministerio sin un fin en mente. Construyen tantas habitaciones como pueden para recibir tanta gente como pueden. Comienzan nuevos ministerios para apuntar a una variedad de temas sociales.
Todo parece correcto. Hasta se evalúa una productividad. Pero no hay estrategia general, y los corredores no van hacia terreno local. La pregunta
que deberíamos hacer no es “¿Estamos golpeando la pelota?” Si no es así… ¿Llegamos a la base?... ¿Vamos en la dirección correcta?... ¿Nos acercamos a terreno local?” ¡Es posible que ni siquiera sepan dónde está el terreno local.
PLANIFICAR PASOS VERSUS
PLANIFICAR PROGRAMAS
Todos hemos visto cómo los programas competitivos pueden lidiar con los presupuestos, calendarios y voluntarios. Hemos aprendido que cuando la iglesia se mueve por inercia, es cuando se programa por demás.
La mayoría de las iglesias son efectivas para diseñar programas para cumplir con ciertas necesidades. Y el personal de la iglesia siente que es su responsabilidad entender las necesidades de su congregación y comunidad, además de estableces los programas apropiados para llegar a esas necesidades.
Cuando usted “piensa en programas” tiende a crear algo para cumplir las necesidades específicas que han surgido en su base de atención o grupo destinatario.
Cuando “Piensa en pasos” hay una diferencia fundamental en su perspectiva. Ahora el objetivo principal no es cumplir con las necesidades de alguien, sino ayudar a alguien a llegar a donde necesita ir.
Para decirlo de otra manera, cuando piensa en programas comienza preguntando, “¿Cuál es la necesidad?” A la primera pregunta sigue la lógica una segunda pregunta: “¿Cómo vamos a cumplir con esa necesidad?” El resultado es un ministerio que trabaje mediante pasos. Ha sido creado para conducir a alguien a algún lado.
Primero determine dónde quiere que la gente esté. Luego descubra cómo va a llevarlos allí. Eso es hacer ministerio con un fin en la mente.
Cuando comience a pensar en pasos, comience a pensar específicamente acerca de cómo llevar a la gente al paso siguiente en su crecimiento espiritual. En intersecciones críticas especificas de la vida cristiana.
Por otro lado, cuando piense en pasos y no en programas, usted también descubrirá maneras de ayudar a la gente a crecer en sus relaciones. Por ejemplo, la gente tiene conocidos antes de convertirse en amigos ocasionales, y deben pasar momentos de calidad antes de que se desarrolle una amistad intima.
Hemos aprendido que las relaciones significativas son más fáciles de desarrollar a través de la dinámica de un grupo activo pequeño.
1.- Cada paso debe ser fácil
Para que alguien pueda dar el próximo paso, no tiene que ser demasiado grande para darlo. Hubo tiempos que fuimos forzados a crear pasos extras, porque los individuos estaban atascados y era muy difícil dar el paso próximo. Por ejemplo, no es fácil para alguien pasar de un servicio de adoración de varios miles de personas a un grupo pequeño de doce.
Es una especie de grupo de tiempo corto, diseñado para hacer el proceso de estar conectado un poco más fácilmente.
2.- Cada paso tiene que ser obvio.
Solamente porque usted haya creado todos los pasos posibles, no significa que la gente los tome inmediatamente. A las personas no les gusta saltar de un arrecife en la oscuridad, tienen que ver dónde está el paso antes de que estén dispuestos a darlo. Las personas necesitan entender dónde están ahora y dónde necesitan ir luego. Para hacer el próximo paso obvio, los líderes necesitan explicar consistentemente qué cosa es importante y qué cosa viene después. La falta de comunicación en cómo funcionan los pasos y dónde están estos ubicados, puede mantener a las personas alejadas de donde necesitan llegar.
3.- Cada paso debe ser estratégico
Si un paso no es estratégico, entonces no es un paso hacia algún lugar. Cuando Alicia se pierde en el país de las maravillas le pregunta al gato:
- ¿Me diría, por favor, qué camino debo tomar desde aquí?
- Eso depende bastante a dónde quieres ir –le responde el gato.
Cuando Alicia responde que realmente no importa, el sonriente gato responde:
- Entonces no importa por donde vayas.
Mientras queramos liderar a las personas a un destino especifico, entonces es importante que cada paso sea en una dirección clara hacia donde queremos ir.
UN PASO ADELANTE PARA LA ORGANIZACIÓN
Hay varias ventajas para la organización al pensar en pasos.
Usted alienta a su equipo a depender uno del otro.
Desalienta a los individuos a defender su territorio.
Borra las líneas difíciles que existen entre los departamentos.
Es probable que descubra lo que no funciona.
Intenta simplificar lo que hace.
Posiciona a los líderes en el pensamiento de una gran imagen.
Un paso, por otro lado, está conectado en general a una relación interdependiente a otros entornos dentro de la organización. Por su naturaleza, el éxito de un paso está atado al éxito de la organización.
PRACTICA 3
REDUCIR EL ENFOQUE
Si realmente se quiere lograr un resultado duradero entonces se necesita eliminar lo que se hace bien por lo mejor.
Como Andy dijo: “Dedicarse un poco de uno mismo a todo significa consagrar una gran parte de nosotros a nada.
La clave `para ser un triunfador es enfocarse en lo que uno hace mejor como el caso de Billy Graham y su ejercito, James Dobson y Familia, Hill Brighty, evangelismo, John Maxwell y liderazgo, George Barna e investigación, etc. etc.
Un montón de iglesias están haciendo demasiado por conquistar al mundo, pero mientras hacen están perdiendo a su propia comunidad y así en vez de ser fuertes en algo son débiles en todo.
Este cambio hacia la complejidad es generalmente sutil, puesto que los líderes pasionales introducen nuevos programas a la agenda de la iglesia y como sólo les gusta agregar y no purgar, terminan por diluirse porque fluyen en muchas direcciones y la mayoría son innecesarias. Este tipo de iglesias crecen sin realmente crecer porque creen que entre más hagan, más crecerán y así confunden peligrosamente actividad con resultados.
Tienen que hacer menos si quieres crecer mas por que si haces más, las posibilidades son que crezcas menos.
Entre los 80 y 90 se incorporó en las iglesias la filosofía “menú” entre más actividades tengas en tu iglesia y lógicamente más le ofrezcas a las personas más crecerás, parecía que este programa daba resultados positivos pero en general fue difícil sostener este plan a largo plazo y en la actualidad muchas de estas iglesias han desaparecido.
Las iglesias sienten una constante presión en proveer programas sobre la base de las necesidades.
La realidad es que no existe la iglesia que cubra las necesidades de todos, además es sumamente difícil decidir qué necesidad es prioritaria, si una iglesia trata de subsistir en base a esto será una iglesia enfocada hacia sí misma y habría perdido su objetivo que es Dios y existen muchas posibilidades de que se autodestruya.
A las personas se les ha permitido construir su identidad en torno a un programa, no a una misión.
Muchos líderes se sienten orgullosos de los programas que han creado y estos han dado resultados positivos, así que cuando estos programas comienzan a fallar, se niegan a abandonarlos.
Los programas necesitan ser cambiados. La misión dura toda la vida.
Los líderes de iglesias temen eliminar algunos programas porque inevitablemente alguien se enojará. Pero si se considera que algún programa debe ser eliminado hay qué hacerlo, porque si no se hace se corre el riesgo de pagar un alto costo por no hacerlo.
Veamos algunos cambios a realizar para reducir en enfoque.
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SIMPLIFICAR: Reducir el enfoque, esto significa resistirse a la complejidad y ejercer la simplicidad.
MATAR LO QUE FUNCIONA: Hay qué eliminar lo que funciona. Y reemplazarlo por lo que funciona mejor, Cristo Jesús nos da el ejemplo en Juan 15 “Mi padre es el labrador todo pámpano que en mí no lleva fruto lo quitará, y todo aquel que lleva fruto lo limpiara” para que lleve más fruto, podar ramas vivas, cortar lo que da fruto para que de más fruto.
CREAR UNA MARCA: ¿Qué esta vendiendo? ¿Trata que la gente compre en su iglesia? o no le importa donde compren, cuando alguien compra algo le gusta algo especifico, le interesa la marca no tanto la compañía.
Así con las iglesias, la gente no busca una iglesia, sino algo significativo para su vida, matrimonio, su familia, algo especifico no general.
REDUCIR EL ENFOQUE: Clarificar la victoria eso significa evaluar y definir lo que realmente funciona, es pensar en pasos y no en programas, es implementar programas que funcionen como pasos específicos que lleven a la gente a una dirección definida.
Reducir el enfoque es dejar de hacer menos para ser más efectivos. No se debe crear una lista de lo que no hay que hacer para proteger a la organización de efectos colaterales de complejidad.
Al reducir el enfoque de menos por más la idea central será atraer almas a Cristo personas traídas a salvación, personas con ganas de seguir al Señor. Nuestro compromiso es proveer esperanza y salvación en Cristo Jesús para el corazón humano.
PRACTIA 4
ENSEÑAR MENOS POR MÁS
Cada día somos bombardeados con sugerencias varias, opiniones e ideas. Cientos de libros de autoayuda se publican cada año, ofrecen consejos similares de cómo lidiar con los mismos problemas. Hay varios pasos para cada objetivo y una lista sin fin de cosas que necesitamos aprender cómo hacerlas mejor. Nuestras listas tienen sub listas. Hasta podemos encontrarnos paralizados sin acción. Podemos, de hecho, encontrar que somos capaces de saber y lograr menos.
Generalmente siempre habrá alguien a nuestro lado enseñándonos cosas que el sabe será para nuestro beneficio, como el caso del autor y el Béisbol, su padre le enseñó a jugar, no le enseñó a perder el tiempo en trivialidades sino lo más importante lo que de verdad vale la pena aprender como son:
“Mantener la vista en la pelota”, “Usar las dos manos para atraparla”, “Golpear al interceptor”, “Mantener la pelota enfrente de uno”, “Hacer contacto solamente”.
Un buen entrenador enseña cómo golpear una pelota rápida, correr por las bases, atrapar una pelota aérea y arrojar a alguien afuera. Y no desperdician tiempo en nada que realmente no ayude a mejorar el juego. No se aprende algo hasta que realmente se necesita saberlo. Y cuando mayor la necesidad, más grande es el interés y el potencial para aprenderlo. Nunca escuche consejos sobre casamientos, hasta después del día de mi boda. Nunca leí libros para padres, hasta que nacieron mis hijos.- Nunca aprendí cómo usar diseño gráfico, hasta que tuve que diseñar mis presentaciones. Nunca comparé diferentes clases de motocicletas, hasta que decidí comprar una.
La mayoría de la gente no aprender solamente para saber más. Aprenden cuando necesitan saber algo. Así que los comunicadores y los maestros necesitan saber algo. Y en algunas situaciones necesitan pasar tiempo asegurándose que la gente entienda por qué necesitan aprender algo. Es la única manera que un maestro puede esperar que cualquier alumno aprenda.
MENOS ES MÁS
“Reducir El enfoque” sugiere hacer un impacto mayor cuando haga menos por más” implica que puede mejorar drásticamente cuánta gente aprender si es que usted enseña menos.
John Coné, ha dicho: “La filosofía de enseñar en la mayoría de las compañías, hoy es similar a las escuelas que yo asistía: un montón de gente sentada en un aula con un experto sentado al frente diciendo cosas.
Los niños aprenden haciendo cosas. Y aprenden nuevas cosas cuando necesitan saberlas.
ENSEÑAR CON EL FINAL EN MENTE
Tiene que enseñar con el final en mente. Piense en pasos, no programas “contesta la pregunta”: ¿Dónde quiere que la gente esté?, mientras “Enseñar menos por más” conteste la pregunta: “¿En que quiere que se convierta la gente?”
Cuando enseña con el final en si mente, esta obligado a priorizar lo que enseña. Eso debe incluir cuáles partes de la Biblia usted enseña. Puede ser que sienta que está obligado a enseñar toda la Biblia a un grupo de edad específica. No trate de hacerlo. No puede amontonar toda la Biblia en unas pocas horas cada semana en unos pocos años. Eso sería recarga de información; estaría enseñando más por menos.
Todas Las Escrituras no son igualmente importantes pero Toda Las Escrituras no son igualmente importantes.
Algunas verdades son más importantes que otras verdades. Isaías 40:22 dice: “El esta sentado sobre el círculo de la tierra”. Este es un pasaje inspirado.
Ahora considere otro pasaje en donde la Biblia dice algo sobre el mundo: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna” (Juan 3:16). Ambos pasajes están inspirados por igual. ¿Pero cree que son igualmente importantes?
Todas Las Escrituras no son igualmente aplicables.
Si ha trabajado con grupos de diferentes edades, sabe que es verdad. Debe haber verdades clave que son importantes para enseñar en cada etapa. Pero hay otras que sólo no son adecuadas para un grupo específico de determinada edad. Esa es la razón por la cual no les enseñamos a los preescolares acerca de la bestia descripta en Apocalipsis. O no les decimos a nuestro grupo de jardín los detalles acerca de David y Betsabé. Tiene más sentido ayudar a crecer a los niños, y Jesús como alguien que quiere ser su mejor amigo para siempre.
Nunca debe comprometer las historias o principios que refuerzan la fe esencial. Debería ser una prioridad entender las Escrituras que ayudan a alguien a entender la salvación, la gracia, la fe y otros aspectos fundamentales del Evangelio.
EL PRINCIPIO EN ACCION
Cada clase, cada maestro debería estar equipado con un plan maestro que identifique específicamente en qué quieren convertir a alguien como resultado de lo que enseñan. Enseñar sin un plan maestro es como elegir las piezas de un rompecabezas al asar, de cajas diferentes, y tratar a la fuerza de hacerlas encajar; nunca tendrá una gran figura final de su personal, líderes, voluntarios y has6ta padres para ver y trabajar sobre ella.
CUATRO PÀSOS PARA ENSEÑAR MENOS POR MÁS
1.- Decidir qué va a decir. Hay tantos recursos de enseñanza disponibles, que para la iglesia es posible enseñar por años y nunca repetir nada.
2.- Decidir decir una cosa por vez. El concepto de “enseñar menos por más” no solamente significa priorizar la información principal que tratamos de brindar, sino también que digamos menos en cada encuentro. La predicación tradicional trata de abarcar tanta información como sea posible en cada mensaje. Demasiada información puede, de hecho, tener un efecto de cancelación;
Hemos descubierto que cuando la gente se va de nuestro servicio de adoración entendiendo claramente un solo principio, es mucho más posible que lo apliquen en su vida diaria.
3.- Decidir cómo va a decirlo. La comunicación es realmente comprometer la mente y el corazón del oyente y, por lo tanto, es importante recurrir a una variedad de estilos de aprendizaje.
4.- Dígalo una y otra vez. Lo que vale la pena recordar es válido repetirlo siempre. La repetición no es mala. Es como aprendemos.
“La presentación, no la información es lo que atrapa la imaginación del alumno”.
CONFUNDEN LA DIFERENCIA ENTRE INFORMACIÓN Y APLICACIÓN
Es fácil hablar de cualquier tema, si se investiga un poco puede encontrarse con mucho material. Pero la gente no va a oírlo si se le enseña algo que realmente no se necesita.
Cuando mira sus lecciones o notas del sermón, la pregunta a hacerse no es ¿Es verdad? ¿Es interesante? ¿Es creativo? ¿Es apasionante? ¿Es entretenido? en lugar de eso, pregúntese: ¿Es de ayuda? Si no es de ayuda, entonces no es relevante.
PRACTICA 5
ESCUCHE A LOS DE AFUERA
Apliquemos un poco de sentido común a esto ¿Tendría más sentido tratar y capturar un mercado que ya está saturado, en donde la mayoría de los clientes usa su producto? puede continuar tratando de alcanzar el cliente que ya ha sido alcanzado, o puede intentar alcanzar nuevos clientes.
Clarifiquemos el concepto desde Las Escrituras. Jesús dijo: “Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido” (Lucas 19:10). Él les ordeno a sus seguidores entrar al mundo y hacer discípulos de aquellos que no eran seguidores (ver Mateo 28:19)
ESCUCHEN A LOS DE ADENTRO QUE OYEN A LOS DE AFUERA
Cuando alguien de adentro invierte en alguien de afuera de la iglesia, algo cambia. El corazón sigue la inversión, y el resultado es una auténtica relación entre alguien de adentro y alguien de afuera. Es por eso que Jesús dijo: “Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón” (Mateo 6:21). Lo que hemos visto suceder en los corazones de los de adentro, ha sido tan significante como lo que hemos testimoniado en los corazones de los de afuera.
La estrategia de “invertir e invitar” ha cambiado radicalmente nuestra visión del evangelio. Muchos de nosotros hemos crecido en iglesias que enseñaban clases de evangelismo, hacia llamados al altar, entregaba folletos y enviaba a los miembros a golpear la puerta de extraños. Sin embargo, ninguno de estos enfoques movilizaba efectivamente a la mayoría
de los miembros a estar personalmente involucrados en alcanzar a los que no estaban dentro de la iglesia.
Más tarde, muchas iglesias cambiaron a un enfoque más natural, dando nacimiento a un movimiento llamado “evangelismo como estilo de vida”, o evangelismo relacional. La idea era que todos deberían priorizar sus amistades para asegurarse que invertían en alguien que necesitaba a Cristo. Esto anima al dialogo espiritual en un contexto de amistad auténtica, para el de adentro y el de afuera. Cuando ambos lados del principio de “invertir e invitar” se practican fervientemente, entonces todos hacen lo mejor posible. Los creyentes se apasionan para hablar de su fe con sus amigos, y los miembros del personal crean entornos donde los amigos que no van a la iglesia se sienten bienvenidos y cuidados.
La estrategia “invierta e invite” inspira a todos a oír más atentamente a los que escuchan a los de afuera. Cuando ellos son invitados y aparecen, todo cambia.
¿Cómo le afectará sentarse al lado de él durante el servicio? El hecho es que ese día va a ser diferente. Oirá todo distinto al tratar de imaginarse cómo su amigo escucha lo que se dice. Escuchará a través de los oídos de alguien de afuera.
Para decirlo de otra manera, los de adentro han decidido que las necesidades de los de afuera son más importantes que las suyas. Cuando eso sucede, la práctica de “oír a los de afuera” se ha convertido en una parte integral de su cultura.
Para oír efectivamente a los de afuera debe aprender su lenguaje.
EL DIA QUE LOS ESTADOS UNIDOS FUE A LA IGLESIA
La gente busca más a Dios cuando se ve envuelto en un problema grave como el del día 11 de Septiembre 01. Ese día todas las iglesias se llenaron hasta el tope pero desafortunadamente parecer ser que nadie estaba preparado para predicarles a esas masas ya que la mayoría no volvió al domingo siguiente.
No supieron escuchar a los de afuera que triste cuando se aprende a escuchar a los de afuera, estos nos obligan a cambiar la manera de hacer la iglesia.
PRACTICA 6
REEMPLAZARSE A UNO MISMO
Un día será reemplazado. Tenga o no estrategia, finalmente usted saldrá. Y ese día, todo lo que hizo, todo lo que soñó y todo lo que construyó será puesto en las manos de alguien más.
El hecho es, que solamente tiene dos opciones
1.- Puede aferrarse desesperadamente a su trabajo hasta que alguien inevitablemente lo reemplace.
2.- Puede preparar a alguien que haga lo que usted hace, y reemplazarse a usted mismo estratégicamente.
La primera opción le da un panorama limitado de qué sucede en el futuro de su organización; la segunda le permite elevar su influencia con la próxima generación, quienes un día liderarán su organización.
El líder osado que se especializa en correr riesgos y entrar en nuevo territorio como pionero.
El líder que nutre es paciente y alentador, pero puede ser que le falte firmeza para confrontar a alguien en áreas que realmente necesita cambiar.
El líder carismático puede inspirar a las masas a seguir un sueño.
El líder innovador usa su creatividad para producir algo relevante y original. Pero tiende a ser posesivo cuando otro artista trata de mejorar lo que él ha creado.
El líder director es excelente coordinando el personal y desarrollando sistemas, aunque puede resistirse testarudamente a los que cuestionan el proceso o quieren experimentar haciendo las cosas de manera diferente.
El líder de alto rendimiento puede hacer malabares con una carga importante de trabajo, y aún es extremadamente productivo, pero su falla al delegar hace que nadie más pueda ver su visión.
Reemplazarse comienza con un cambio de opinión como líder. Demanda que enfrente ciertas tendencias personales que pueden ser no saludables para su organización.
APLAUDIR A AQUELLOS QUE APLAUDEN A OTROS
Reemplazarse a usted mismo significa que está dispuesto a alcanzarle a alguien una parte significante de lo que usted hace. Luego es usted responsable de ayudar a esta persona para que tenga éxito. Que sea aplaudida y reconocida por lo que ha hecho.
La mayoría de los líderes son compensados de acuerdo a su habilidad de innovar, crear, producir, dirigir y actuar.
La práctica de reemplazarse a usted mismo es crítica para la longevidad de una organización, pero si quiere convertirla en un hábito debe reconocerla y recompensarla cuando sucede. Entonces cada líder en cada nivel comienza celebrando cuando ven líderes convirtiendo a otros líderes exitosos.
Algo que diferencia a la iglesia de otros asuntos, es que necesita voluntarios para funcionar. Un grupo pequeño. Por ejemplo, requiere un líder por cada diez o doce individuos.
Una de las razones por las que seguimos teniendo voluntarios geniales, es porque se reemplazan a sí mismos.
TRES PASOS PARA DELEGAR
Reproducir más líderes para hacer más de las mismas cosas, es la única manera en que podemos complacer las demandas de grupos más pequeños.
1.- Romperlo. Enseñarle a alguien para reemplazarlo comienza por tener un claro entendimiento de lo que está tratando de pasar.
Si alguien va a enseñar lo que hace, entonces tiene que saber qué es lo que hace. Porque si no puede explicar o definir que hace, entonces es menos factible que alguien más lo haga.
2.- Delegar. Cuando se reemplaza a usted mismo, está pasando algo que le ha pertenecido. Está equipando a alguien con algo que usted ha hecho, llevándolo a un papel que usted ha hecho. Asumiendo que usted es humano, es posible que sienta una serie de emociones al hacerlo. Y si la pelota se cae, tenderá a querer levantarla rápidamente. Pero recuerde, está entrenando a alguien más para llevar la pelota. No trate de ser el héroe que arregla los problemas y llega a la línea final.
Esta allí para entrenar y modelar. Todos aprenden mejor de los errores. Las personas que toman el principio “reemplazarse a uno mismo” ven a los otros alrededor como compañeros, hno como competidores.
3.- Dejar ir Esto puede ser duro, pero es necesario. Tarde o temprano habrá que irse. Así que practiquemos ahora. Dios nos da varias oportunidades a través de la vida para aprender esta lección. Dejamos nuestra casa como estudiantes. Vemos a nuestros hijos convertirse en independientes. Perdemos a alguien que amamos. La vida es movimiento, y hay momentos que tenemos que dejarla pasar.
Algo inesperado sucedió cuando Larry Burkett, hace unos años, fundador de Christian Financial Concepts, decidió que era hora de irse del liderazgo y unir su organización sin fines de lucro con otra entidad. Esto significaría que Burkett le permitiría a los otros utilizar lo que a él le había llevado veinticinco años construir. El modelo que eligió fue el que algunos podían haber considerado su competencia. Ministerios Crown. Pero lo que Burkett modeló mientras trabajaba a través de una transición, es una lección increíble para los líderes cristianos.
En una ocasión fue citado y dijo:
-Mi temor más grande en la vida es estar enfrente del Señor y oírlo decir: “Tenía mucho más para ti, pero lo sostuviste demasiado fuerte”.
Larry Burkett reconoce algo que es muy fácil de perdernos. Es más fácil dejar ir lo que no nos pertenece de todas maneras.
Larry Burkett tenía el hábito de dar lo que tenía. Creía que la agenda de Dios era más importante que la suya.
Todos lo que lo conocieron dicen que sostenía con una mano abierta. Así que no es sorpresa que cuando vino la hora, fue más fácil irse. Había tenido años de práctica
PRACTICA 7
TRABAJAR EN ESO
Todo lo que uno tiene que hacer es ver, y darse cuenta que lo fundamental tiende a desaparecer incluso en los mejores jugadores, si no trabajan sus habilidades.
Bonds reconoce que no es suficiente jugar el juego, también hay que trabajar en él.
Aquellos que trabajan en el ministerio no son diferentes, no importa cuánto hayamos servido, no interesa cuántos sermones hayamos dado o cuántos ministerios exitosos promovido, si no somos consistentes evaluando tanto nuestra actuación y nuestra estratégicas; en algún punto comenzaremos a vacilar y a perder.
La auto evaluación no es un concepto nuevo. El libro de Génesis registra que Dios tuvo un tiempo para evaluar su propio trabajo. Al final de seis largos días en que creó, Las Escrituras dicen que antes de descansar, evaluó. Vio lo que Él hizo y contempló, y aquí: “fue muy bueno”
Más tarde aprendimos que evaluó la situación de Adán y vio que no era bueno para un hombre estar solo. El margen no sucede accidentalmente ni tampoco automáticamente. Debe ser practicado.
HACER ESPACIO EN SU CALENDARIO
Desde el comienzo tiene que programar tiempos consistentes para alejarse de la batalla y evaluar su plan, como así también su actuación. No importa cuán duro trate de ser, simplemente no puede ser hecho mientras todo usted está en acción.
CONFRONTEMOS LOS HECHOS
Es increíble cómo una evaluación honesta puede conducir a observaciones bastante desagradables.
Cuando un debate honesto nos lleva a diferencia de opiniones, es bueno. Pero cuando nos lleva a habladurías y criticas, puede ser mortal.
UNA PREGUNTA CRÍTICA
Nadie que lea este libro tendrá que preguntar si está trabajando en su ministerio. Eso es lo que hacemos. La pregunta critica que todos debemos hacernos es: “¿Estoy realmente encontrando el tiempo para trabajar e el ministerio?”
Todos los grandes atletas miran las películas de su actuación en el juego. Todos los grandes atletas detectan los problemas y los corrigen. Todos los grandes atletas celebran sus victorias. Si tanto planeamiento y esfuerzo se hace por un trofeo, ¿cuánto más deberíamos hacer para impactar a alguien eternamente?
SEMINARIO TEOLOGICO BAUTISTA MEXICANO
CAMPUS HOREB
REPORTE DE LECTURA DEL LIBRO 7 PRÁCTICAS EFECTIVAS
DEL LIDERAZGO
EDNA ORTUÑO TENORIO
1. La idea principal: Que a través de la ejecución de las 7 prácticas, se logré el mayor rendimiento en las operaciones y estrategias que se llevan a cabo en la organización y trabajo de la iglesia. Sabiendo que no existen programas hechos que se ajusten para todo; sino que los tiempos cambian y así las necesidades en todas las esferas de la vida y circunstancias que se dan en lo cotidiano. Por lo tanto, no sólo será necesario cambiar nuestra manera de hacer las cosas, más aun en ocasiones tendremos que destruir los moldes antiguos y abandonar programas o prácticas que no estén llevándonos a alcanzar lo que queremos. Es importante entonces, tener muy presente que en cualquier programa que deseemos llevar a cabo, nos aseguremos de abandonar aquellas cosas que si bien es cierto son cómodas para nosotros, para el ministerio resultan inefectivas.
La realización de estás 7 prácticas sin duda simplificará el trabajo y lo hará mucho más efectivo. Ya que:
• Clarificar el objetivo recarga nuestra energía.
• Pensar en pasos no en programas, protege nuestra alineación.
• Reducir el enfoque, asegurarse de que lo lleva a donde necesita, nos lleva a la excelencia.
• Hacer menos cosas para causar un mayor impacto, nos garantiza ser pertinentes.
• Escuchar a los de afuera nos mantiene concentrados en el crecimiento.
• Reemplazarse a uno mismo nos asegura longevidad.
• Tomarse tiempo para evaluar su trabajo, y celebrar sus victorias, nos posiciona en un lugar para decidir.
2. Los problemas que aborda:
a). La falta de conocimiento de la iglesia, acerca del objetivo que persigue. Es realmente impresionante y creo desalentador también, ver como muchas iglesias se encuentran en esta situación. ¡Vaya! Si es que acaso persiguen algo, o tal vez ya la costumbre los aprisionó y sólo permanecen de cierta forma y con ciertas prácticas por tradición; la cual, las ha llevado a perder el rumbo, porque ahora se encuentran confundidas en cuanto a su objetivo.
El carecer de un objetivo claro es carecer de sentido, es ignorar qué es lo más importante.
b). La confusión entre actividad y progreso. Pensar que sólo porque la gente está ocupada y haciendo un montón de cosas se está teniendo éxito, es un grave error.
El asunto es que si toda esa actividad no nos lleva hacia donde queremos ir, es tiempo perdido. No posee valor alguno una actividad que no produce el resultado deseado; a fin de cuentas es sólo actividad que empaña muchas veces el objetivo, hasta hacerlo desaparecer. De pronto nos encontramos perdidos haciendo cosas que ya no sabemos para qué las hacemos, y otras que realizamos por comodidad.
c). La falta de enfoque. Delimitar el objetivo parece ser restrictivo, pero cuando piensa en esto, realmente lo libera para hacer más. Sólo haces una cosa realmente bien. El asunto es que cuando las visiones compiten entre si, se pierde el enfoque, y se aumenta la complejidad. No es necesario hacer muchas cosas, más bien es dañino porque nos encontraremos pronto haciendo de forma deficiente muchas actividades, pudiendo hacer una o dos, con excelencia. El problema radica en que si se quiere alcanzar todo, se puede terminar sin alcanzar a nadie.
d). La enseñanza que no es requerida. No se aprende algo hasta que realmente se necesita saberlo. La mayoría de la gente no aprende solamente para saber más, aprenden cuando necesitan saber algo. Enseñar algo que no es de ayuda para lo que la gente está viviendo en el momento, será irrelevante, por interesante que parezca. Así que es un error garrafal enseñar un montón de cosas que no podrán ser aplicadas.
e). Enfocarse en aquellos a quienes se quiere conservar. Si usted está lo suficientemente rodeado por gente que piensa como usted piensa, creerá más y más que es la mejor manera de pensar.
f). La negación a reemplazarse a uno mismo. El aferrarse desesperadamente a su trabajo, podrá bien ser una señal de un liderazgo defectuoso; en el sentido de que no fue capaz de preparar a alguien que continuase las tareas para las cuales usted, no estará siempre presente para realizar. Además le da un panorama limitado acerca del futuro de su organización.
g). La falta de evaluación en el proceso. Es cierto que si no somos consistentes en evaluar lo que estamos haciendo pronto podremos vacilar y aun perder. Si no damos tiempo para estimar, apreciar y calcular nuestra actuación y estrategias, difícilmente seremos certeros en nuestro trabajo. Además esto nos proporcionará elementos para celebrar los triunfos porque podremos verlos con claridad. A veces la misma actividad, y el querer alcanzar aun más cosas deja fuera de nuestra mente la celebración de las victorias. Y realmente el no aplaudir, el no festejar el alcance de los logros es desalentador. Entonces, evaluemos constantemente nuestro trabajo, y celebremos las victorias.
3. Las ideas más creativas:
• Preguntarse qué es lo más importante:
Si toda la gente en nuestras iglesias tuviera claro: ¿Qué es lo más importante? Tendríamos menos espectadores sentados cada domingo, tendríamos menos desertores, menos personas confundidas y menos líderes caminando en distintas direcciones. Y entonces aprovecharíamos la diversidad de recursos de los cuales Dios ha provisto a su iglesia.
¿Cómo podrá la iglesia entender y saber qué está tratando de alcanzar, cómo sabrá si está ganando o no?
El gran privilegio de dirigir al pueblo de Dios, es también una gran responsabilidad; y algo fundamental en el ministerio es: CLARIFICAR EL OBJETIVO para lo cual tendremos que responder a la pregunta: ¿Qué es lo más importante? La respuesta a esta pregunta tendrá que lograr que ningún jugador en nuestro equipo, es decir, ningún miembro de nuestra iglesia, esté confundido o ignorante acerca de su objetivo.
CLARIFIQUE LA VICTORIA Y ESTABLEZCALA COMO UN HÁBITO EN SU IGLESIA.
Aquí 4 pasos para ayudarle a lograrlo:
1. Resumir el objetivo en una frase simple. Se trata de que (el equipo), la iglesia, entienda claramente el objetivo; si éste es resumido con sencillez será entendido y esto cambiará la manera de trabajar de la gente.
2. Mantener el éxito tan específico como sea posible. Si la gente sabe hacia dónde va, si tiene claro a dónde debe llegar, sabrá también si lo está logrando o no. Es fácil saber cuándo se gana, porque se llega al destino deseado.
3. Reestablecer el objetivo frecuente y creativamente. Como es cosa muy fácil distraerse, o preocuparse con temas secundarios, será mejor que usted como un buen líder desarrolle el hábito de recordar a todos: ¿Qué es realmente importante? La constancia en la comunicación es fundamental para ganar. Hágalo de tantas maneras como le sea posible, comunique con palabras, con actitudes, con letras, con música, con todo lo que esté y no a su alcance pero: ¡ comunique ! ! !
4. Reunirse para clarificar la victoria en cada nivel. Necesita un cartel indicador de logros, y una reunión para observarlos tiene un lugar muy importante puesto que le declarará si está alcanzando el objetivo, si está caminando rumbo a la victoria, o no.
Es tan alentador gustar del dulce sabor de la precisión, de conocer, de saber qué estás persiguiendo, de tener claro a dónde tienes que llegar. Y verdaderamente los recursos que se tienen en la iglesia van encontrando su lugar y lo hacen con un fuerte impulso porque saben en qué se van a invertir, saben hacia donde van. No espere más... clarifique la victoria!
Una vez clarificado el objetivo, descubra la mejor manera de llegar allí. Sólo que resaltaremos una señal de alerta que dice que la actividad no es igual a progreso. El hecho de que la gente esté ocupada haciendo muchas cosas, no quiere decir que se esté alcanzando el objetivo. Si lo que hacemos no nos lleva a donde queremos ir, entones es tiempo perdido. Concluimos que no es suficiente clarificar el objetivo, sino está claro cómo llegar.
• Pensar en pasos no en programas. Respecto a la manera de llegar, pensemos en pasos efectivos cuyas características son:
• Fáciles.- Reduzca al mínimo la dificultad. No espere que la gente dé grandes pasos porque muy probablemente no podrá, entonces hágalos más cortos, más fáciles.
• Obvios.- Que la gente entienda dónde está, y a dónde necesita ir.
• Estratégicos.- Que sea en una dirección clara hacia donde queremos ir.
Soy testigo fiel de que demasiadas iglesias necesitan desesperadamente una mejora. Creo que muy poca gente en el mundo, tiene claro a dónde quiere llegar; pero es sumamente delicado que la iglesia de Jesucristo no tenga claro su objetivo, pues la situación se torna caótica. Considero entonces que es hora de poner en claro el objetivo que perseguimos, y abandonar aquellas cosas que estamos haciendo, las cuales no nos llevan al destino deseado. Entonces es momento de dar pasos efectivos que nos permitan llegar a donde queremos ir.
Me siento en gran manera alentada a continuar, porque no había entendido que la actividad no es igual a progreso.
No basta caminar, hay que hacerlo en la dirección correcta.
• Permanecer enfocado. Cada paso que se crea tiene que funcionar para eso y nada más. Concentrarse permite lograr la excelencia, alcanzar el objetivo. Si realmente quiere lograr un resultado duradero, entonces necesita eliminar lo que hace bien por lo que potencialmente hace mejor.
• Enseñar más por menos: Si “reducir el enfoque” sugiere hacer un impacto mayor cuando haga menos, “enseñar menos por más” implica que puede mejorar drásticamente cuánta gente aprende si es que usted enseña menos. Ahora bien, tomemos en cuenta que esto no está haciendo referencia necesariamente a que diga menos palabras, más bien, a reducir el espectro de lo que se enseña para cubrir menos información. Entonces limite lo que enseña, a aquellas cosas que su gente necesita oír.
• Escuche a los de afuera. Mucha gente que está fuera de la iglesia, ve lo que ésta hace como irrelevante, y sin embargo, la mayoría de las iglesias lo sigue haciendo como siempre. Si se trata de alcanzar a los de afuera; no deberíamos enfocarnos en la gente que está dentro, deberíamos preguntar: ¿Qué entornos hemos diseñado, teniendo a los de afuera en mente? Y además de esto no olvidar que para escuchar efectivamente a los de afuera, debemos aprender su lenguaje.
• Aprenda a delegar lo que usted hace. Cuando intenta quedarse, alienta a los suyos a construir su organización alrededor de su personalidad; cuando se plantea reemplazarse, esto le permite tener una visión. Delegar el liderazgo a la próxima generación es vital para la longevidad de cualquier organización, especialmente la iglesia. Reemplazarse comienza con un cambio de opinión como líder. Enfóquese en el desarrollo de otros, y reemplácese a usted mismo.
• Tómese tiempo para evaluar su trabajo, y celebrar sus victorias. Debemos mirar la película de nuestra actuación; debemos detectar los problemas y corregirlos, y después celebrar nuestras victorias. Si quiere que una conducta se repita, entonces necesita recompensarla.
Hemos de tener presente que la visión, los valores y las estrategias, no son tan importantes como el éxito de estar en sintonía con lo que Dios desea hacer en su iglesia.
Edna Ortuño Tenorio
25-Agosto-2007
Seminario Teológico Bautista Mexicano; Campus Horeb
Materia: Iglecrecimiento
Profesor: Hno. Rafael Pola Baca
Alumno: Hno. César Roberto Ramos Gutiérrez
Libro: 7 prácticas efectivas del liderazgo. Resumen de las 7 prácticas.
Fecha: 24 de agosto del 2007
PRÁCTICA 1
CLARIFICAR EL OBEJTIVO
Definir qué es importante en cada nivel de la organización
Mantener el resultado ayuda a todos los involucrados a estar informados sobre la condición de la organización.
La iglesia debería de ser más categórica que cualquier otra clase de organización para “clarificar la victoria”, simplemente porque lo que está en juego es mucho más: la eternidad depende del balance.
Clarificar la victoria simplemente significa comunicar a su equipo qué es realmente importante y qué es lo que realmente importa.
Los voluntarios necesitan saber que su inversión en tiempo va a hacer la diferencia. Que sepan cuál es el objetivo, y qué lo que hacen cuenta en realidad.
Los pastores si no definen con sus líderes qué es ganar, lo definirán por ellos mismos. Los líderes efectivos constantemente sostienen imágenes claras de lo que se supone la iglesia debe ser.
El triunfo dispara una cadena de eventos. A eso le llamamos impulso.
Ganar motiva a un equipo. Tenderán a:
• Trabajar más duro
• Ser menos negativos
• Creer en el liderazgo
• Permanecer involucrado.
Cuatro pasos para clarificar la victoria:
1. Resumir el objetivo en una frase simple. Cuando todos en el equipo entienden claramente el objetivo, cambia cómo hacen lo que hacen.
2. Mantener el éxito tan específico como sea posible. Cuando se ha diagramado un objetivo claro y especifico, se convierte obvio cuándo se logra o no.
3. Reestablecer el objetivo frecuente y creativamente. Así que los buenos líderes desarrollan el hábito de recordar a todos qué es realmente importante. Lo que sea que estemos usando como indicador de tantos, necesita estar constantemente a la vista de nuestros líderes.
Hay un número de manera en las que una iglesia puede continuamente reestablecer el objetivo:
• Anunciarlo en carteles
• Establecer estratégicas que se cuestionan en cada reunión.
• Usar videos creativos
• Escribirlo en sus anuncios y promociones
• Promocionarlo en un ambiente creando eslóganes que lo refuercen.
4. Reunirse para clarificar la victoria en cada nivel
Una iglesia realmente necesita en cartel indicador de logros.
PRÁCTCA 2
PENSAR EN PASOS, NO EN PROGRAMAS
Antes de comenzar algo, asegúrese que lo lleva a donde lo necesita
Cuando “piensa en pasos” hay una diferencia fundamental en su perspectiva. Ahora el objetivo principal no es cumplir con las necesidades de alguien, sino ayudar a alguien a llegar a donde necesita ir. Un paso en una parte de una serie de acciones que sistemáticamente llevan a una persona a algún lugar.
Primero determine dónde quiere que la gente esté. Luego descubra cómo va a llevarlos allí. Eso es hacer ministerio con un fin en la mente.
Cuando comience a pensar en pasos, comience a pensar específicamente acerca de cómo llevar a la gente al paso siguiente en su crecimiento espiritual.
Por otro lado, cuando piense en pasos y no en programas, usted también descubrirá maneras de ayudar a la gente a crecer en sus relaciones.
Loe recursos del entorno el autor maneja las siguientes categorías de entorno, el Vestíbulo, Living o Mesa de cocina.
El Vestíbulo describe un entorno más grande, en donde estamos sensibles a las necesidades de aquellos que visitan la iglesia por primera vez.
El Living es un entorno en donde un número de personas puede contactarse y conocer a otras.
La Mesa de Cocina es el entorno más íntimo. Es lo que en un principio llamamos nuestros grupos pequeños o experiencia de grupo de Comunidad.
Hay varias ventajas para la organización al pensar en pasos. Aquí hay algunas:
• Usted alienta a su equipo a depender uno del otro.
• Desalienta a los individuos a defender su territorio.
• Borra las líneas difíciles que existen entre los departamentos.
• Es probable que descubra lo que no funciona.
• Intenta simplificar lo que hace.
• Posiciona a los líderes en el pensamiento de una gran imagen.
PRÁCTICA 3
REDUCIR EL ENFOQUE
Hacer menos cosas para causar un impacto mayor
Muchos de nosotros debilitamos nuestro potencial, invirtiendo mucho tiempo en áreas de nuestras vidas, en donde tenemos potencial.
Para lograr un resultado duradero se necesita eliminar lo que se hace bien por lo que potencialmente hace mejor.
Tu potencial de lograr un resultado con tu vida está directamente relacionado con le predisposición a reducir el enfoque.
Las iglesias con desorden de déficit de atención
Lo que es verdad para las personas también lo es para las organizaciones: hay una tendencia natural de derivarse hacia la complejidad.
Las iglesias pueden hacer más, pero no llegan a más personas. Las iglesias se destacan por sacrificar crecimiento a largo plazo, por programas a corto plazo. Tanto de lo que hacen, divide sus recursos y su enfoque, creando así una barrera al crecimiento real.
Fallan en entender algo no intuitivo acerca del crecimiento: tienes que hacer menos si quieres crecer más. Y si haces más, las posibilidades son que crezcas menos.
Las iglesias sienten una constante presión en cuanto a proveer programas a presión en cuanto a proveer programas sobre la base de las necesidades.
A las personas se les ha permitido construir su identidad en torno a un programa, no a una misión.
Los programas necesitan cambiar, una misión dura toda la vida. El valor de un programa está unido a cuánto bien ayuda a llevar a cabo la misión. Y los buenos líderes son siempre más apasionados por la misión que por el programa.
Cuando a un líder le falta el coraje para hacer los cambios necesarios, el futuro de la organización está en juego.
Cambios a realizar para reducir el enfoque:
• Simplificar, simplificar: Reducir el enfoque significa resistir a la complejidad, ejercer la simplicidad.
• Matar lo que funciona: Quizás tenga que eliminar lo que funciona para reemplazarlo por algo que funciona mejor. Reducir en enfoque significa elegir lo que potencialmente funciona mejor, en lugar de lo que está funcionando. Mire con atención: El programa con más potencial es decir: mejores frutos…debería ser su prioridad.
• Crear una marca: Delimitar el objetivo significa crear entornos como modelos diferentes. Debe decidir primero qué imagen quiere crear en las mentes de la audiencia que quiere alcanzar. Tiene que identificar que está vendiendo. Uno de los desafíos más grandes que enfrenta la iglesia hoy, es la necesidad de cambiar su imagen. Lo que puede hacer, sin embargo, es cambiar la imagen de la iglesia creando entornos atractivos y de ayuda para las distintas etapas de la vida de todos. Pero si se piensa comenzar a hacer del entorno una marca diferente, debe hacer dos cosas: 1. Identificar al grupo a que apunta, 2. Diseñar cada entorno para hacer una cosa. Usted necesita descubrir a quién puede alcanzar, e ir por ello.
• Construir u equipo de especialistas: Una organización más simple y delimitada permite a cada individuo especializarse en una habilidad, como estrategias de grupos pequeños y más.
• Reducir es el camino: Cuanto más delimita cada entorno, mayor importancia adquiere. Cada vez que delimita el enfoque, magnifica el nivel de las relaciones. Cuanto más delimita cada entorno, más grande el impacto.
¿Demasiado pesadas para hacer un giro?
Clarificar la victoria significa evaluar y definir lo que realmente funciona. Pensar en pasos y no en programas, es identificar e implementar programas que funcionen como pasos que lleven a la gente a una dirección estratégica.
Reducir el enfoque, por otro lado, es decir hacer menos para ser más efectivos.
Reenfoque su misión
Donde sea que una iglesia decide reducir el enfoque, debería ser en el contexto de nuestro llamado a conducir a las personas a seguir a Cristo.
PRÁCTICA 4
ENSEÑAR MENOR POR MÁS
Diga solamente lo que necesitan decir a las personas que necesitan oírlo.
Sobrecarga de información
No se aprende algo hasta que realmente se necesita saberlo. Y cuanto mayor la necesidad, más grande es el interés y el potencial para aprenderlo.
La mayoría de la gente no aprende solamente para saber más. Aprenden cuando necesitan saber algo. Así que los comunicadores y los maestros necesitan saber algo. Así que los comunicadores y maestros tienen una responsabilidad crítica: deben asegurarse que saben lo que la gente realmente necesita aprender. Y en algunas situaciones necesitan pasar tiempo asegurándose que la gente entienda por qué necesitan aprender algo. Es la única manera que un maestro puede esperar que cualquier alumno aprenda.
Menos es más
Decimos que deberíamos repensar qué y cómo comunicarlo a su equipo. Las cosas que trate de enseñar deberían estar limitadas a aquellas cosas que su gente necesita oír.
Si usted es el responsable de entrenar su organización, debe aprender a priorizar información. Tiene que dar una mirada a lo que su audiencia necesita saber, y separar lo que es importante de lo que es solamente interesante.
Los buenos maestros comienzan por identificar qué es más importante saber para sus alumnos.
Enseñar con el final en mente
Tiene que enseñar con el final en mente. Piense en pasos, no programas “contesta la pregunta”: ¿Dónde quiere que la gente esté?, conteste la pregunta: “¿En qué quiere que se convierta la gente?”
Y cuando filtra todo lo que enseña a través de su lente, se hace mucho más fácil decidir qué debería decir, como así también lo que no. Cuando enseña con el final en su mente, está obligado a priorizar lo que enseña.
La práctica “Enseñar menos es más” está basada en tres premisas. La primera:
1. Todas las Escrituras están igualmente inspiradas.
2. Todas las Escrituras no son igualmente importantes.
3. Todas las Escrituras no son igualmente aplicables. Debe haber verdades clave que son importantes para enseñar en cada etapa. La clave es tomarse el tiempo para decidir antes cuáles son los grandes temas para cada grupo y entonces establecerlos como un mínimo irreducible.
El principio en acción
Cada clase, cada maestro debería estar equipado con un plan maestro que identifique específicamente en qué quieren convertir a alguien como resultado de lo que enseñan.
El modelo de Lucas 2:52
El concepto que Jesús creció en “sabiduría y en estatura, y en gracia para con Dios y los hombres” provee un modelo claro de crecimiento espiritual.
Hemos dividido el crecimiento espiritual de un niño en tres categorías, basándonos en el versículo: sabiduría, fe y amistad. Y hemos determinado que esos tres temas específicos son críticos para ayudar a los niños a convertirse en creyentes saludables:
1. La habilidad de tomar decisiones sabias basadas en la verdad de las Escrituras.
2. La disposición de poner su fe en Dios a través de cada situación de vida.
3. Su demostración de amor y amabilidad hacia la gente de su mundo.
Queremos que cada niño que crezca diga: “Necesitamos hacer una elección sabia”, “Puedo creer en Dios, sin importar cómo”, “Debería tratar a otros de la manera en que quiero que me traten a mí”.
Nuestras historias de la Biblia posicionan siempre a las Escrituras como una fuente de sabiduría. La adoración enfatiza el poder y el amor que Dios. Los grupos pequeños les dan la oportunidad a los niños pequeños de ser amigos, de dialogar sobre su fe y alentarse unos a otros.
Cuatro pasos para enseñar menos por más
1. Decidir qué va a decir. Nuestros líderes son responsables de determinar qué es importante aprender para nuestra gente.
2. Decidir decir una cosa por vez. Digamos menos en cada encuentro. Concéntrese en solo una verdad o principio; esto magnifica el potencial de cada oyente para realmente entenderlo.
3. Decidir cómo va a decirlo. La comunicación es realmente comprometer la mente y el corazón del oyente y, por lo tanto, es importante recurrir a una variedad de estilos de aprendizaje.
4. Dígalo una y otra vez. Lo que vale la pena recordar es válido repetirlo siempre. Cuanto más creativo se presentación, será más efectivo al comunicar información relevante.
Por qué las iglesias enseñan más por menos
Es más fácil enseñar más por menos que menos por más. Los métodos convencionales son más fáciles. Si Usted enseña un principio, tiene que extenderlo y explicarlo creativamente, hasta que esté entendido por completo.
• El contexto del ministerio tiende a ser más demandante que el contenido.
• Han caído en el mito de “profundizar”
• Se preocupan lo suficiente para decir
• Temen dejar algo fuera
• Lo que enseñan está predeterminado por entidades de afuera del ministerio
• Confunden la diferencia entre información y aplicación
Las personas necesitan maestros que pongan prioridades en lo que comunican. Necesitan líderes que los lleven de la mano y les enseñen como bailar.
PRÁCTICA 5
ESCUCHE A LOS DE AFUERA
Enfóquese en quien trata de alcanzar y no a quien quiere conservar.
La asistencia en las iglesias en los Estados Unidos de América está en declive, y aquellos en el exterior parecen estar con una indiferencia creciente hacia lo que la iglesia tiene que ofrecer.
Los problemas pueden surgir si elige ignorar al de adentro por alcanzar al de afuera.
Demasiadas iglesias se esconden detrás de lo que es conveniente y cómodo, mientras una generación entera es dejada en la oscuridad.
Cualquier iglesia con cualquier historia siempre lucha con convertirse en una organización con mentalidad cerrada.
La estrategia “invierta e invite” inspira a todos a oír más atentamente a los que escuchan a los de afuera.
Al invitar a los de afuera estamos alertas de cómo piensan y qué necesitan.
Los de adentro han decidido que las necesidades de los de afuera son más importantes que las suyas. Cuando eso sucede, la práctica de “oír a los de afuera” se ha convertido en una parte integral de su cultura.
Para oír efectivamente a los de afuera, debe aprender su lenguaje.
Cuando se oye a los de afuera, lo fuerza a cambiar la manera en que se hace la iglesia.
PRÁCTICA 6
REEMPLAZARSE A UNO MISMO
Aprenda a delegar lo que usted hace
“No importa quién sea, cuál famoso o poderoso, un día alguien te reemplazará”.
El hecho es, tiene solamente dos elecciones:
Puede aferrarse desesperadamente a su trabajo hasta que alguien inevitablemente lo reemplace.
Puede preparar a alguien que haga lo que usted hace, y reemplazarse usted mismo estratégicamente.
Aprender a delegar el liderazgo a la próxima generación es vital para la longevidad de cualquier organización, especialmente la iglesia.
Si falla al desarrollar una estrategia para reemplazarse, forzará a talentos individuales a quedarse en espera, causará que los líderes potenciales salgan de la organización, interrumpirá una mirada hacia adentro de parte de miembros valiosos, demorará su habilidad para reclutar voluntarios y limitará el crecimiento de sus programas y ministerios.
Aquí hay algunos ejemplos de cómo los diferentes atributos de los líderes pueden construir paredes que impiden en desarrollo de nuevos líderes:
1. El líder osado que se especializa en correr riesgos y entrar en nuevo territorio como pionero, y hasta ve las ideas nuevas de otros como amenaza o en competencia con las suyas.
2. El líder que nutre es paciente y alentador, pero puede ser que le falte firmeza para confrontar a alguien en áreas que realmente necesita cambiar.
3. El líder carismático puede inspirar a las masas a seguir un sueño, hasta puede ponerse celoso y a la defensiva cuando es el momento de seguir a un nuevo líder.
4. El líder innovador usa su creatividad para producir algo relevante y original. Pero tiende a ser posesivo cuando otro artista trata de mejorar lo que él ha creado.
5. El líder director es excelente coordinando personal y desarrollando sistemas, aunque puede resistirse testarudamente a los que cuestionan el proceso o quieren experimentar haciendo las cosas de manera diferente.
6. El líder de alto rendimiento puede hacer malabares con una carga importante de trabajo, y aún es extremadamente productivo, pero su falla al delegar hace que nadie más pueda ver su visión.
Cuando aplaude a los líderes que empujan a otros a estar en escena, envía un mensaje a todos de lo que es importante en su organización.
Sí puede exitosamente inspirar a los voluntarios existentes a reemplazarse, tienen la posibilidad de crecer exponencialmente. La raíz del objetivo está en asegurarse que cada voluntario cumpla su misión de encontrar otro.
Algo que diferencia a la iglesia de otros asuntos, es que necesita voluntarios para funcionar.
El punto es que aunque no lo sepa todo, no debería impedirle de enseñarle a alguien. Su responsabilidad es enseñar lo que sabe. Y si desarrolla un corazón de entrenador, puede ayudar a la gente a crecer y mejorar sus habilidades.
Tres pasos para delegar:
1. Romperlo. Si alguien va a enseñar lo que hace, entonces tiene que saber qué es lo que hace.
2. Delegar. Está equipando a alguien con algo que usted ha hecho, llevándolo a un papel que usted ha hecho.
3. Deja ir. Esto puede ser duro, pero es necesario. La vida es movimiento, y hay momentos que tenemos que dejarla pasar.
PRÁCTICA 7
TRABAJAR EN ESO
Tómese tiempo para evaluar su trabajo, y celebrar sus victorias.
El punto es, no importa cuán bueno es el sistema, un tiempo consistente de evaluación puede producir beneficios muy buenos.
No se puede evitar perder algunas cosas.
Estos tiempos pequeños pero específicos de evaluación, son piezas críticas de espacios que han sido creadas y que son cuidadosamente guardadas.
Somos capaces de resolver algunos de nuestros problemas más complicados, y reencausar nuestras energías en donde hagan una enorme diferencia en nuestro ministerio futuro.
Una evaluación honesta puede conducir a observaciones desagradables.
Un aviso de precaución: el sentido común nos dice que los debates abiertos y honestos crean el potencial para los impactos negativos en las relaciones. Si quiere que una conducta se repita, entonces necesita recompensarla. Pocas cosas tienen más recompensa que escuchar su nombre como parte de la historia de una vida cambiada.
CONCLUSIÓN
UN DESAFÍO FINAL
Clarificar el objetivo recarga nuestra energía. Pensar en pasos, no en programas, protege nuestra alineación. Antes de empezar algo, asegurarse que lo lleve a donde lo necesita, nos lleva a la excelencia. Hacer menos cosas para causar un impacto mayor, nos garantiza ser pertinentes. Escuchar a los de afuera nos mantiene concentrados en el crecimiento. Reemplazarse a uno mismo nos asegura longevidad. Y tomarse tiempo para evaluar su trabajo, y celebrar sus victorias, nos posiciona en un lugar para descubrir.
LAS 7 PRÁCTICAS EFECTIVAS DEL LIDERAZGO
SINTESIS DE LAS SIETE PRÁCTICAS
A través de todo el libro, el autor nos maneja la forma más rápida y eficaz de establecer un liderazgo efectivo dentro de la Iglesia. Un primer punto es de tener bien claro un objetivo, es decir saber qué es lo importante en cada aspecto de la Iglesia y qué es lo importante para la Iglesia. Un segundo punto nos habla de ir paso a paso al desarrollo de la iglesia y no querer hacer programas muy elaborados estrategias muy concienzudas que entran en un letargo y sopor espiritual.
Hay una tercer cosa que tomar en cuenta hay que reducir el enfoque, es decir, entre menos cosas hagamos mayor impacto tendremos en nuestro liderazgo; otra de las cosas son que hay que enseñar lo menos por más, enseñar o decir sólo lo que necesita expresar o comunicar a las personas que necesitan oírlo.
Una quinta es poder escuchar a los de afuera, o sea, enfocarse a que tipo de personas va dirigido y se trata de alcanzar y no que tipo de personas se quiere conservar. Otra es la capacidad de reemplazarse a si mismo, en otras palabras, lograr delegar lo que se hace a otras personas capaces. Por último se debe trabajar en eso, es decir, tomarse el tiempo para evaluar el trabajo y celebrar las victorias.
CUAL ES LA IDEA PRINCIPAL
La principal idea del libro es presentar 7 elementos claves que el autor propone para que el liderazgo de una iglesia sea dinámico y cubra con los distintos aspectos de la misma de forma que el crecimiento y desarrollo sean de un tipo exponencial, es decir que la gente que no es creyente se impacte se vuelva en discípulos y compartan para que estas a su vez hablan y se vuelva esto en una cadena interminable.
CUALES SON LOS PRINCIPALES PROBLEMAS QUE ABORDA
La principal problemática que aborda en la forma en que estas siete practicas se ponen de manifiesto en la iglesia son lo de tratar de manifestar un cambio tan impactante que pocas son las comunidades que aceptan el desafío del cambio y el desafío de un liderazgo efectivo.
CUALES SON LAS IDEAS MAS CREATIVAS
Simplemente las ideas mas creativas son las de proponer 7 practicas para un liderazgo efectivo, es decir, la creatividad que haya en cada líder espiritual para desarrollar dependerá de cómo aplique estas siete practicas de manera efectiva.
COMO SE RELACIONA CON LA IGLESIA Y EL MNISTERIO
La relación estriba en que dadas las practicas de liderazgo son herramientas útiles de donde echar mano para que, en el tiempo de enfrentar el desafío de una congregación, no la hagamos con las manos vacías sino que tengamos la forma de desarrollar y acrecentar a la iglesia y no en cantidad sino en el impacto del evangelio de las vidas de las personas no creyentes y en la forma en la que se van formando discípulos mediante el bautismo.
Fernando Arízaga Torales
23 / agosto / 2007
PRACTICA 7
TRABAJAR EN ESO
Tómese tiempo para evaluar su trabajo, y celebrar sus victorias.
Hacer espacio en su calendario
Desde el comienzo tiene que programar tiempos consistentes para alejarse de la batalla y evaluar su plan.
Cuentos semanales
Es una reunión en la que se evalúa los resultados de avanzan.
Es una reunión donde se toman dediciones importantes como por ejemplo cambio de calendario.
CONFRONTEMOS LOS HECHOS
NO HAY NADA COMO UN MAL DIA EN EL CAMPO DE JUEGO PARA PRODUCIR UNA BUENA COPIA EN LA PAGINA DEPORTIVA DEL DÍA SIGUIENTE.
CELEBREMOS LAS HISTORIAS
Si quiere que una conducta se repita, entonces necesita recompensarla. Pocas cosas tienen más recompensa que escuchar su nombre como parte de la historia de una vida cambiada.
Una pregunta critica
ESTOY REALMENTE ENCONTRANDO EL TIEMPO PARA TRABAJAR EN EL MINISTERIO.
PRACTICA 7
TRABAJAR EN ESO
Tómese tiempo para evaluar su trabajo, y celebrar sus victorias.
Hacer espacio en su calendario
Desde el comienzo tiene que programar tiempos consistentes para alejarse de la batalla y evaluar su plan.
Cuentos semanales
Es una reunión en la que se evalúa los resultados de avanzan.
Es una reunión donde se toman dediciones importantes como por ejemplo cambio de calendario.
CONFRONTEMOS LOS HECHOS
NO HAY NADA COMO UN MAL DIA EN EL CAMPO DE JUEGO PARA PRODUCIR UNA BUENA COPIA EN LA PAGINA DEPORTIVA DEL DÍA SIGUIENTE.
CELEBREMOS LAS HISTORIAS
Si quiere que una conducta se repita, entonces necesita recompensarla. Pocas cosas tienen más recompensa que escuchar su nombre como parte de la historia de una vida cambiada.
Una pregunta critica
ESTOY REALMENTE ENCONTRANDO EL TIEMPO PARA TRABAJAR EN EL MINISTERIO.
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